Amazonía Joven, adelantó un proceso de formación, en donde se mejoraron las condiciones pedagógicas de 8 instituciones educativas y sus comunidades aledañas a través la capacitación en Tecnologías de la Información y Comunicación - TIC garantizando el acceso a internet y la dotación tecnológica con el fin de fortalecer la vida laboral y académica de las comunidades.
La Acción Cultural Popular - ACPO - co-solicitante del proyecto lideró la formación a través de las Escuelas Digitales Campesinas - EDC beneficiando a 800 personas entre los 14 y 70 años, de las cuales 438 fueron mujeres y 362 Hombres. La formación se centró en el manejo de las TIC, el uso de internet para la formación académica y laboral, el fortalecimiento comunitario, el uso de las redes sociales para la comercialización de productos y, en general, los beneficios de las plataformas digitales en los usos cotidianos. Por otro lado, las y los beneficiarios tuvieron acceso a programas educativos gratuitos en la virtualidad.
Junto a dicha formación, se dotaron 5 sistemas de energía solar fotovoltaica para el uso y formación audiovisual, la alfabetización digital y el uso de las TIC en 7 centros poblados de la cuenca media del río Caguán y el antigua ETCR Oscar Mondragón en la Zona de Reserva Campesina del Pato Balsillas.
En las comunidades campesinas de la cuenca media del Río Caguán la cobertura y calidad educativa es baja. Así mismo, la capacidad infraestructural del acceso a internet y la incorporación de herramientas digitales es nula, la brecha digital frente a otras regiones del país es evidente e importante. Junto con la participación de ACPO, co-solicitante del proyecto Amazonía Joven, se logró reducir dicha brecha en el marco de la promoción de derechos digitales democratizando el acceso a las TIC y la infraestructura tecnológica, el uso de dispositivos tecnológicos y mecanismos positivos y, estratégicamente, el uso significativo frente a la apropiación de los recursos tecnológicos gracias a un acompañamiento activo y directo en las Instituciones Educativas.
Este proceso, desarrollado a partir de las Escuelas Campesinas Digitales se centró en la formación pedagógica como estrategia de alfabetización digital en las TIC y se articuló y consolidó en el marco de la dotación infraestructural, no sólo en términos de conectividad a internet, sino también, en dotación tecnológica y equipamientos para la provisión de energía solar.
La estrategia pilar de ACPO permitió formar a más de 800 personas entre jóvenes, docentes, personas de la comunidad y personas de las asociaciones productivas en uso del computador, correo electrónico, navegación en redes y consultas en internet, garantizando la promoción de condiciones de calidad educativa en zonas rurales aisladas y la consolidación de un semillero de jóvenes con competencias digitales con capacidades para generar contenido audiovisual relevante para la región.
Dicho semillero partió de la articulación en formación audiovisual en el marco de las Escuela Río de Colores, bajo dos estrategias esenciales, en primer lugar, el periódico El Campesino articulado a una red de reporteros rurales a partir de los cuales se formó en periodismo participativo incidente, con una ruta que incluye la formación en temas de escritura, periodismo y sobre todo en distintos lenguajes mediáticos. En segundo lugar, la fotografía, la producción de videos, la administración de páginas web junto con una dotación de equipos audiovisuales y tecnológicos. Este proceso generó competencias a los participantes útiles a futuro para adelantar procesos de comunicación comunitaria, claves para mantener informados a los pobladores, organizaciones y comunidades en general, pero también para visibilizar y difundir situación de crisis y riesgos que potencialmente pueden contribuir a los propios sistemas de autoprotección comunitaria.
La dotación, por su parte, se conformó en salas de informática con 7 computadores y una impresora en cada institución educativa, a partir de allí se brindó conectividad a internet a través de la gestión del recurso. Ello fue profundamente significativo, pues para la gran mayoría de participantes fue la primera oportunidad de poder acceder a estos servicios. Esto determinó contundentemente la promoción y el mejoramiento de las condiciones para la calidad educativa al permitir que las y los estudiantes gozarán de experiencias pedagógicas significativas, relevantes y novedosas.
Así mismo, para algunas instituciones, el voltaje de energía eléctrica no fue suficiente para sostener las salas informáticas por ello, la dotación se amplió hacia la instalación de 5 paneles de energía solar logrando garantizar las condiciones infraestructurales.
Finalmente, se generó unión comunitaria al desarrollar un proceso que integró generacionalmente a la comunidad. El aprendizaje del uso del correo electrónico, y las plataformas digitales como mecanismos y herramientas para la realización de trámites y servicios “desde casa”, logró reducir las grandes distancias que existen en el Caguán. En este mismo orden, la comunicación entre comunidades de la región se fortaleció en gran medida. La réplica de los aprendizajes obtenidos durante el proceso por líderes de la comunidad, a través de la estrategia de dinamización, fortaleció enormemente, no sólo el proceso, sino su sostenibilidad. La incorporación de herramientas digitales con usos específicos para el hogar, las fincas, los animales o el bioma amazónico, generó valor agregado al proceso.
En conclusión, en el marco de los procesos educativos, las nuevas tecnologías de la información permitieron generar ambientes de aprendizaje democráticos, participativos e innovadores. En general, el garantizar el derecho al acceso de información contribuye a generar comunidades atentas a los procesos coyunturales que existen no sólo en su región, sino a nivel nacional y local.
Reducir la brecha digital en el Caquetá a partir del desarrollo de procesos de formación con la población campesina en el uso de las TIC fortalece al tiempo el liderazgo de comunidades campesinas vulnerables, mejora la calidad educativa y la apropiación de recursos digitales contribuyendo, además, a la construcción de un Modelo de Desarrollo Sostenible y a la construcción de Paz Territorial.
Cuando en territorios aislados, con poco acceso a internet, escasa capacidad tecnológica instalada y un bajo nivel de conocimientos en el uso de las TIC por parte de las comunidades, se adelantan procesos de alfabetización digital, tanto en jóvenes, como en docentes y personas de la comunidad y de las asociaciones productivas, acompañadas de equipamiento tecnológico y conectividad, el uso de las TIC se promueven de manera adecuada y creativa como herramientas pedagógicas para la innovación, el mejoramiento de la calidad educativa en todos los procesos formativos, la retención escolar y el mejoramiento de la gestión en los procesos comunitarios. Cuando estas iniciativas se incorporan en los Proyectos Educativos Institucionales PEI además de asegurar su utilización a largo plazo, se fortalece la gestión de las I.E hacia toda la comunidad.
Un aprendizaje clave gira sobre los posibles mayores impactos al articular los procesos de alfabetización digital, con las iniciativas de promoción de la soberanía alimentaria y de fortalecimiento de sistemas productivos y agroambientales. Si bien, no fue evidente tal sinergia, al menos, en la cuenca media del Río Caguán, es un imperativo en un territorio con bajo acceso a la información y con retos en la comunicación entre las comunidades por los desafíos en la accesibilidad y la situación de seguridad para las comunidades. Así mismo, la alfabetización digital puede cumplir un papel central en los procesos de fortalecimiento organizacional, y de construcción de sistemas de autoprotección comunitario, de los cuales tampoco se conoció evidencia de sinergias potenciales con los componentes del proyecto relacionados con estos tópicos.