Si buscamos sanarnos, es porque sentimos enfermedades en el cuerpo y en el alma; si buscamos alternativas, es porque lo convencional no nos ha dado respuestas eficaces y tal vez se nos acaba la paciencia y la espera. Si volvemos la mirada en busca de lo tradicional, es porque confiamos en la sabiduría de los mayores y el conocimiento experiencial que han subsistido por siglos de persecuciones y hogueras.
Si buscamos sanarnos, es porque sentimos enfermedades en el cuerpo y en el alma; si buscamos alternativas, es porque lo
convencional no nos ha dado respuestas eficaces y tal vez se nos acaba la paciencia y la espera.
Si volvemos la mirada en busca de lo tradicional, es porque confiamos en la sabiduría de los mayores y el conocimiento
experiencial que han subsistido por siglos de persecuciones y hogueras.
En el marco del proyecto Cultivando Paz, ejecutado por Corporación Manigua, con recursos USAID y cooperación técnica de ACDIVOCA, el cual tiene como objetivo Impulsar procesos de seguridad alimentaria, inclusión económica y construcción de paz territorial a través del fortalecimiento de la agricultura familiar, el encadenamiento productivo y la creación de escenarios para la reconciliación con 340 familias campesinas, víctimas del conflicto armado y/o en condición de vulnerabilidad, de los municipios de Cartagena del Chairá y San Vicente del Caguán en el departamento del Caquetá. Contiene en su plan de formación herramientas pedagógicas y metodológicas para el abordaje de la Economía Solidaria, con los enfoques de género, derechos, reconciliación y construcción de paz.
Durante el año 2009, se desarrollo un plan de formación en horticultura urbana con 100 familias en Florencia y Cartagena del Chaira, formación que se enmarcaba en la emergencia. A partir de esta experiencia se evidenció, la necesidad de transformar algunas de las estrategias para este tipo de atenciones, que necesitan que los participantes produzcan de manera rápida alimentos para resolver su situación alimentaria lo más pronto posible.
Por esta razón durante el año 2010, se formula un plan de formación para acompañar a 120 familias en Florencia y Cartagena del Chaira, el cual pretende que estas personas produzcan en 6 meses alimentos orgánicos en sus huertas caseras, que ayuden a mitigar las condiciones de vulnerabilidad alimentaria en la que se encuentran, que las personas realicen intercambios y trueques de saberes y productos con sus vecinos y amigos, y que generen algunos ingresos a partir de la venta de excedentes.
Corpomanigua, realiza ejercicios de identificación de las condiciones iniciales de las familias participantes de un proyecto, eso nos permite mejorar las percepciones y ajustar las acciones planificadas en la intervención.
Ahora se trata de que sean las mismas familias participantes quienes identifiquen cómo están frente al reto de producir para autoabastecerse y cumplir con una cantidad de productos alimenticios en el mercado local; que se hagan conscientes de la disponibilidad de mano de obra, de las características del terreno que han destinado a la agricultura, la disponibilidad de los materiales.
Aportar conocimiento a los y las participantes de las bases teóricas, históricas, constitucionales y legales de la asociatividad y su enfoque solidario, para el fortalecimiento de las Asociaciones Ganaderas Locales a las que pertenecen.
Ampliar en los participantes los Conceptos sobre Seguridad, Autonomía y Soberanía alimentaria y las problemáticas actuales para garantizar la producción y disponibilidad de alimentos en el campo.
En el marco del proyecto Crisálida 2010, se pretende vincular a 17 nuevos dinamizadores de Florencia y Cartagena, en un proceso formativo que permita reforzar sus aprendizajes sobre la producción orgánica de alimentos, ganen herramientas para acompañar a sus vecinos en este mismo proceso, y cuenten al final del proceso con algunos elementos de liderazgo para continuar dinamizado otros procesos en sus comunidades. Esta ruta de trabajo se desarrollará con adultos que inician su proceso productivo a partir de la huerta casera, y que se sienten motivados a acompañar a otros vecinos.
